La selección de tus lugares favoritos de destino se ha visto impactada por el cambio climático que modifica la naturaleza de todo el planeta.
Antes de elegir una playa, un valle, una laguna, o una ciudad colonial, debes estar bien seguro que durante tu visita no se presente ningún fenómeno meteorológico como el de las lluvias, el excesivo calor, o mucho menos una tormenta tropical, ciclón o huracán.
La decisión de elegir destino turístico no solo representa un problema para el visitante, también impacta de manera drástica a uno de los sectores más productivos del país.
En el año 2022, el PIB turístico reportó un monto de poco más de dos millones 300 mil pesos, equivalente al 8.5 % del PIB nacional; este ramo productivo representa una de las principales fuentes de ingresos en México, pues es un país rico en biodiversidad, cultura y tradiciones, por lo que empresarios de la industria se sienten amenazados por tal situación.
Un ejemplo de alteración de ecosistemas son los arrecifes de coral en el Caribe mexicano, que por sufrir incremento en las temperaturas del agua, se están blanqueando, pues se ve afectada la biodiversidad, estos lugares tan populares para el buceo y el snorkel, comienza a perder su atractivo.
En cuanto a la presencia de fenómenos meteorológicos extremos, estos se han visto intensificados en frecuencia y gravedad, como los ciclones y las tormentas tropicales. Basta recordar el caso del huracán Otis, en Acapulco, que dejó una estela de destrucción, de la que los propios habitantes no han podido resurgir. O bien, en el caso de la Riviera Maya, la pérdida de bancos de arena, daños significativos a las infraestructuras hoteleras y hasta la aparición de abundante sargazo.
También podríamos mencionar la escasez de recursos hídricos, debido a las altas temperaturas que se vivieron durante el verano pasado, así como a la falta de lluvias en esa temporada. De continuar esta situación podría obligar a las autoridades a solicitar restricciones en el uso del agua, lo que afectaría en la visita de los turistas, quienes demandan un uso constante del suministro de ésta.
La alteración en el patrón de los climas como es la disminución de temperaturas frías en invierno en destinos de montaña, que afecta al turismo de nieve; o bien, el aumento de temperaturas en verano, puede hacer menos atractivos los destinos de playas.
Un poco más preocupante para los habitantes de destinos turísticos son los desplazamientos de comunidades locales, sobre todo de zonas costeras debido al aumento del nivel del mar y la erosión, pues el abandonar el lugar no solo haría que se perdiera el encanto turístico sino las propias tradiciones y modos de vida.
Actúa Ahora: Cómo Puedes Ayudar
- Viaja en temporadas bajas para reducir el impacto ambiental.
- Elige servicios turísticos que promuevan prácticas sostenibles.
- Apoya a las comunidades locales comprando productos autóctonos.
- Participa en programas de conservación o reforestación durante tus visitas.
- Protege destinos turísticos y sus comunidades con decisiones responsables.
